martes, 10 de diciembre de 2013

La calidad, el factor olvidado (artículo de David Quirós)

Hoy tenemos el placer de tener en Sense of Wonder un artículo invitado escrito por mi buen amigo David Quirós, que toca un tema tan delicado como importante: la (falta de) calidad de algunas ediciones de libros de género fantástico en nuestro país. Aunque David se centra en un libro concreto de una editorial concreta, este es un problema bastante extendido. Sin ir más lejos, cuando hablé aquí mismo de los libros de la trilogía de la Primera Ley de Joe Abercrombie tuve que referirme a algunos llamativos fallos de traducción y revisión y, por ejemplo, el caso de Ready Player One ha sido uno de los más sonados de los últimos años. También se ha hablado en repetidas ocasiones de la edición de El camino de los dioses de Brandon Sanderson y sobre la muy reciente publicación de Kraken de China Miéville. Llueve sobre mojado y, por desgracia, en una de mis próximas reseñas tendré que volver a tocar un tema similar. (Nota: Desde Twitter me señalan que La furia del aprendiz de Jim Butcher, publicada no hace muchos meses, tiene multitud de errores como los que se pueden apreciar en esta imagen)

David y yo hemos hablado bastante, entre nosotros y con otros lectores del libro en cuestión, sobre la conveniencia de publicar estas reflexiones. Finalmente, nos hemos decidido a ello puesto que creemos que la situación es preocupante y que al final todos salimos perdiendo con este tipo de ediciones: los lectores, por supuesto, pero también los autores, editores y traductores. Entendemos que la forma de solucionar estos problemas no es correr un tupido velo sobre ellos, sino sacarlos a la luz para que sirvan de reflexión. 

Así que, sin más preámbulos, os dejo, no en manos enemigas, sino en muy buenas manos.

La calidad, el factor olvidado (o ¿Por qué lo llaman "amor" cuando quieren decir "repos"?)

He perdido la cuenta de en cuantas ocasiones he comenzado esta redacción, y testigo de ello son las arrugadas resmas amontonadas en la papelera, cual despojos de un cruento lance. Sé objetivo, me he repetido hasta la saciedad, pero francamente la situación es demasiado compleja, y la pregunta que me hago no es otra que: ¿hay solución?

El problema no es nuevo, pero día a día va aumentando de manera incomprensible. La CALIDAD, sí, en mayúsculas y negrita para que se vea bien. ¿Qué ha ocurrido con la calidad de los libros publicados en España? Ha bajado de manera mayúscula, no en todos los ámbitos o editoriales, pero sí de una manera trágicamente palpable. Los precios, sin embargo, han sufrido la evolución inversa, suben sin parar. El resultado final, analizando el cociente entre la calidad del producto y el precio del mismo, es desastroso.

Un lector no conoce los pasos intermedios que conlleva la publicación de un libro de un autor extranjero, ni falta que hace, pero al menos entiende que en esa cadena hay tres eslabones básicos: la traducción, la corrección y la edición. Parte del universo editorial español supone que los lectores sólo pueden opinar sobre la historia publicada, vetando o ninguneando cualquier crítica al producto en sí. No nos engañemos, parte del problema es esa actitud, el considerar que los lectores no son sino entes cuya única función es comprar. Pues no señor, un lector es un cliente y cuando este acude a una librería y compra un libro la situación es la misma que un comensal en un restaurante. El lector espera adquirir un producto de calidad, y obviamente, si la narración en sí no le agrada, nadie tiene la culpa, pero cuidado, la presentación y calidad del producto sí que tiene responsables y de ello tratan estas líneas.

Entremos en materia con un caso concreto, un volumen publicado recientemente, y del cual la propia editorial ha alabado las ventas del mismo en el mes de noviembre. Se trata del último volumen de la saga Honor Harrington, En manos enemigas, de David Weber. Quiero creer que este caso es una anomalía y no la norma, pero aun así conviene analizar el problema antes de que al famoso tópico de “los españoles no leen”, se agregue “y los que lo hacen no se enteran de lo que leen”.

El primer error grave es la terminología. Si se va a publicar una saga lo lógico es preparar un glosario de tal manera que se mantenga la coherencia de un volumen a otro. Si durante seis volúmenes se ha empleado el término “repo” para referirse a los miembros de la República Popular de Haven, ¿a qué viene usar el término original “peep” en el séptimo volumen? Los lectores ya se han acostumbrado a ese término, y con esta modificación han conseguido que frunzan el ceño en señal de desagrado en nada menos que ochenta y seis ocasiones. Quiero destacar que el nulo uso del concepto glosario está muy, pero que muy extendido en nuestro país.

Lo triste es la cantidad de términos incorrectamente traducidos, algo que no es posible comprender, máxime cuando cualquiera, sin más que un ordenador conectado a internet, puede obtener un significado correcto en nuestra lengua. Veamos algunos ejemplos:

  • Steadholder: si en los volúmenes anteriores se ha usado el término “gobernadora”, ¿por qué emplear ahora “lugarteniente”?
  • Rear Admiral: significa Contraalmirante, y no “Almirante de la retaguardia”. Basta con estudiar los rangos de la marina militar.
  • Screening: en inglés significa “hombres o naves desplegadas en torno o como avanzadilla de una formación militar de mayor envergadura con el fin de avistar al enemigo y prevenir del ataque o bien proteger de una amenaza determinada”. Por ello la traducción podría ser Escolta o Cobertura, y no “apantallamiento”.
  • Levelers: ésta me ha dejado particularmente perplejo. La palabra elegida en la publicación ha sido “alzas” y no dejo de preguntarme cómo se ha podido llegar a tal conclusión. Igualitaristas o Igualitarios, en mi humilde opinión, hubiera sido más acertado, dado que leveler significa: “persona que trabaja por la abolición de desigualdades (sociales)”.
  • Picket: otra palabrita de ámbito militar. Y sí, en castellano una traducción es “piquete”, cuyo significado habitual es “Grupo de personas que, pacífica o violentamente, intenta imponer o mantener una consigna de huelga”. Otro significado menos conocido es “Grupo poco numeroso de soldados que se emplea en diferentes servicios extraordinarios”. En inglés ocurre lo mismo pero en el ámbito militar significa: pequeño destacamento de tropas o buques de guerra estacionados en posiciones de avanzadilla con el fin de prevenir un ataque. Basta realizar este sencillo análisis para buscar una traducción más acorde a la terminología militar en nuestro idioma: Guarnición, Guardia o Vigilancia, por poner tres ejemplos.
  • Clases de naves: en este caso la regla es clara, o se traducen los nombres, si existe traducción, o se dejan en el original, pero ¿mezclarlos?, a mí particularmente no me convence. En la página 129 se presenta el caso más claro: tenemos naves clase Sultán, Tigre, Cimitarra, Marte, Conquistador y, ¿Overlord? Ciertamente el término Señor de la Guerra no quedaría bien, pero siempre se podría considerar clase Cacique o Comandante, por mucho que esta última opción nos recuerde a la Guerra de las galaxias.
  • Sky Domes: En esta ocasión lo veo correcto. Dado que cada vez que ha salido este término en libros anteriores se ha usado una traducción distinta, léase Firmamento Abovedado de Grayson S.L. en Campo de deshonor o Cúpulas Celestes de Grayson en Bandera en el exilio, lo mejor es dejarlo en el original y no liar más la madeja.

En segundo lugar tenemos la coherencia. Si al finalizar una frase o párrafo el lector no entiende lo que ha leído pero sí comprende las palabras por separado, entonces se presenta un problema gravísimo. Y si se da una y otra vez a lo largo del libro entonces más vale que dejemos de leer y nos pasemos al ganchillo. Con unos ejemplos se verá más claro:

  • Página 9:
    • Texto original: “. . . and at least none of the Levelers' known leadership had survived the bloodbath. Of course, it was almost certain that at least some of their inner cadre actually held seats on the Committee itself. They had to for the Levelers to have come so close to success, and they remained unidentified so far . . . whoever they were.”
    • Traducción publicada: “…y al menos ninguno de los líderes conocidos de los alzas había sobrevivido a aquel baño de sangre. Claro que también se daba casi por seguro que al menos parte del equipo principal de los alzas había conseguido asientos en el Comité. Así debía ser, teniendo en cuenta lo cerca que habían estado de conseguir llevar sus teorías a buen puerto, pero el caso es que tampoco se sabía a ciencia cierta en el seno del Comité quienes tenían aquella ascendencia ideológica”.
    • Propuesta alternativa a la frase en cursiva: “…lograr sus objetivos, y hasta ahora seguían sin ser identificados… fueran quienes fueran/quienesquiera que fueran
  • Página 10:
    • Texto original: “Yet the very reasons Pierre was willing to trust him with that authority underscored the fact that Saint-Just could never be the threat Ransom might someday become.”
    • Traducción publicada: “Y aun así, la verdadera razón por la que Pierre deseaba hacer honor a la autoridad que se le había otorgado a Saint-Just apelaba al simple hecho de que él nunca representaría la amenaza en que Ransom sí podría convertirse algún día
    • Propuesta alternativa a la frase en cursiva: “Aun así, el principal motivo de que Pierre estuviera deseoso de confiarle dicha autoridad respondía al hecho de que él nunca representaría la amenaza en que Ramsom podría llegar a convertirse algún día”.

Avancemos unas cuantas páginas, por si acaso estuviéramos ante una situación puntual.

  • Página 120:
    • Texto original“Earl White Haven has arrived, Sir,” the yeoman said.
    • Versión publicada: “El Conde Haven Albo ha llegado, señor - dijo el obrero.”
    • Comentarios: en esta ocasión no sé qué decir, me he quedado de piedra. A ver, un alto cargo llega al despacho de otro alto cargo y le abre la puerta… ¿un obrero? Por favor, señores, aunque sólo fuera por atender al contexto sería un ayudante, un secretario, pero jamás un obrero. Otra cosa es que estuvieran de reformas, pero no es el caso, y aun entonces chirría que da gusto. Analicemos este caso con más detalle, sigamos el hilo desde los diccionarios hasta el contexto, a ver a dónde llegamos. La traducción al castellano del término yeoman es por un lado: pequeño terrateniente o hacendado, y no, esta no nos vale. Su otra acepción es militar: soldado de caballería, va a ser que tampoco pero ya nos muestra el camino. Acudamos al diccionario inglés: Royal Guard o Beefeater (UK). Perfecto, ésta sí que cuadra.
  • Página 122:
    • Texto original: “… the entire round trip…”
    • Versión publicada: “… el viaje de ida y vuelta entero
    • Comentarios: Si es de ida y vuelta entonces por definición es entero. Se puede decir el viaje entero, todo el viaje o el viaje de ida y vuelta.
  • Página 122:
    • Texto original: “more if they have longer than expected layovers at any of their stops”
    • Versión traducida: “más incluso si por alguna razón tienen que alargar más las paradas de lo previsto…”
    • Comentarios: “alargar las paradas más de lo previsto”
  • Página 361:
    • Texto original: “Which was precisely what Harkness had done. Now he switched the minicomp off, shoved it back into his pocket, and slithered down the last few meters of his current ventilation duct. It wasn't quite a perfect way to his destination, but he figured it came as close to one as he had any right to ask for. The grille at its end was set into the long wall of the passage, but it was clear down at the far end from the lifts. No one was likely to be looking this direction—after all, the only thing there was to see was the bulkhead the passage dead-ended into—but its positioning also meant he wouldn't be able to look things over before he acted, and he didn't much like jumping blind this way. On the other hand, he didn't have a lot of choice, and he'd spent enough time viewing the output from the security cameras covering the passage to know what he ought to find waiting for him. He breathed a silent prayer that he was right, worked his way around to get his feet against the grille, drew both pulsers, and kicked hard”.
    • Versión publicada: “Y eso era precisamente lo que había hecho Harkness. Entonces apagó el miniordenador, se lo volvió a meter en el bolsillo y se deslizó por los últimos metros del conducto de ventilación en el que se encontraba. No es que fuera el mejor camino para alcanzar su destino, pero creía que llegaría todo lo cerca que podía pedir en una situación como aquella. La parrilla que había al final daba a la gran pared del pasadizo, pero estaba lo suficientemente lejos de los ascensores. No era muy probable que hubiese alguien vigilando aquel sector. Al fin y al cabo, lo único que se podía ver por allí era el mamparo al que iba a dar aquel pasillo sin salida, pero su posición también indicaba que Caslet no iba a poder ver que había por allí antes de entrar en acción, y no le gustaba mucho la idea de saltar a ciegas. Por otra parte, tampoco tenía otra opción, y ya había pasado tiempo suficiente visionando las cámaras de seguridad que cubrían aquel pasillo como para saber qué debía esperar encontrarse allí. Caslet imploró en silencio estar en lo cierto, colocó los pies contra la parrilla, agarró los dos púlser y se impulsó fuerte con las piernas”.
    • Comentarios: La acción la realiza Harkness, y no Caslet. Por otro lado, en un conducto de ventilación “grille” sería rejilla. Y lamento ser pesado, pero dado que explica la posición de Harkness apoyando los pies contra la rejilla, la opción más adecuada es: “se impulsó con fuerza” o “se dio impulsó fuertemente”, sin necesidad de explicar de nuevo con qué parte del cuerpo se impulsa. Esta reiteración de la información se da a menudo, por ejemplo en la página 139: “atacarían de buena gana contra la caravana”. Debería ser: “atacarían de buena gana la caravana”, sin el contra.

Y así podemos seguir página tras página, y eso sin pararnos en los errores de género o en la colocación de los adjetivos y adverbios, los cuales son tan frecuentes que he preferido tan sólo mencionarlos de pasada. Bueno, no, mejor vemos algunos casos, al fin y al cabo nada es más ilustrativo que unos buenos ejemplos.

  • Página 124: “...incluso temido que hiciera uso de su cargo con vistas a su próxima incorporación como oficial al mando para forzar cierto tipo de momentos íntimos con ella”. Dado que tratamos de militares la palabra correcta sería rango, y por favor, que estamos en el 2013, podemos decir forzarla a tener relaciones íntimas con él sin rubor alguno.
  • Página 124: “otra pequeña parte de él se preguntaba si tal vez ella habría estado más equivocada como para temer algo así de lo que él prefería pensar”. En este caso la construcción debería ser tan… como, y al final de la frase: “, tal y como”.
  • Página 126: “Su ascenso de capitán almirante de la retaguardia…”, obviamente, “de capitán a contraalmirante”.
  • Página 128: “…volvió su mirada felina de ojos oscuros hacia su jefe de personal y le picó con el puro como si fuera un púlser”. En el original el autor usa la expresión “jabbed the cigar at him” la cual deriva de la más común “to jab a finger at someone/something” que significa señalar a alguien o algo con el dedo. Por lo tanto no le picó con el puro, sino que le señaló con el puro. ¿Y qué decir del “púlser”? En el volumen 6 se usó la expresión “arma de pulsos”, en el quinto igual, en el cuarto… pulsos otra vez…. ¿Por qué ahora “púlser”?
  • Página 129: “La pérdida acumulada en potencia de ataque es, por tanto, a una nave clase Sultán”. O usamos equivale o tenemos una frase mal construida.
  • Página 132: “...el sistema probablemente sería útil, pero pedirle al cuartel general que les dejara usarla…”, el género, no olvidemos el género: a el sistema le corresponde usarlo.
  • Página 133: “Si tienen un atasco en los sensores…” Analizando el contexto de las frases que preceden a esta, queda claro que los Mantis no disponen de suficientes plataformas de sensores para cubrir una zona en cuestión, luego los repos o peeps, que planean un ataque, buscan huecos o zonas sombra para colarse a través de dicha red. Luego atascos no nos sirve en este contexto aunque es la traducción casi literal de bottleneck. Pare entenderlo mejor debemos visualizar el área de acción de un sensor como una esfera. En una red ideal los radios de acción de los sensores, nuestras esferas, se solaparían sin dejar zonas sin cubrir. En el caso que analizan los repos se supone que la situación no es ideal, luego habrá zonas donde las esferas no se solapan e incluso ni siquiera son tangentes entre sí. Cuando esto ocurre tenemos una zona de sombra con forma de cuello de botella.
  • Página 133: “…mientras lo decía iban saliendo pequeños puntos rojos en el sistema estelar…” .A ver, no salen sino que se iluminan o aparecen. Luego debería ser: se iban iluminando o iban apareciendo.
  • Página 134: “..volcar la garrafa, así que el agua acabó explotando por la parte superior…”. El agua, si las leyes físicas no han cambiado, no explota cuando una botella vuelca sin romperse, se derrama, o incluso se sale, fuera de un recipiente. Hombre, si se tratase de la combinación de Coca-Cola y Mentos entonces si lo dábamos por bueno, ¿no? Es cierto que en el original el autor usa la expresión “exploded” pero un traductor no puede traducir de manera literal, creo, pues eso lo puede hacer cualquiera con un diccionario en la mano. Ya puestos, garrafa es la traducción literal de carafe, que no es otra cosa que una botella de cuello ancho, es decir, una jarra.


Se mire como se mire, por objetivo que uno desee plantearlo, este volumen no debería haber llegado a las tiendas. No pretendo decir que los anteriores fueran un dechado de virtudes, pero en este hay demasiados errores de traducción, y la labor editorial ha fracasado aun más. Este libro no ha sido corregido suficientemente, a las pruebas me remito, ni en cuanto al estilo ni a la gramática. Tampoco es válido escudarse en que esta saga ya ha visto varios traductores, porque es trabajo de la editorial presentar un producto de calidad y no un desastre como este. Además, no olvidemos que un traductor no es un mago, la calidad de un libro depende del escritor original y cada cual tiene su forma de escribir, su acento si me permitís el símil. Adaptar la filosofía de un volumen publicado para un público con una cultura diferente no es tampoco tarea fácil, eso lo debemos entender. Dudo mucho que sea igual traducir a Isaac Asimov que a China Miéville, por poner un ejemplo. Por ello se entiende la dificultad que entraña traducir y se explica la necesidad de que antes de publicar un texto traducido este deba pasar por un severo proceso de corrección, aunque solo sea para eliminar erratas. De haber sucedido en este caso yo no estaría martirizando mi teclado ni vosotros leyendo este texto, estaríamos leyendo el libro en cuestión, y a buen seguro despotricando contra la editorial porque el siguiente volumen de la saga aún no está disponible. Alguien habría reenviado el texto al traductor señalando los problemas, y quizás entre ambos lo hubieran solucionado satisfactoriamente. No ha sido el caso y he ahí el problema. Peor aún, cuando se ha consultado la cuestión la respuesta de la editorial ha sido tajante: sí ha sido corregido

En resumen, es cierto que aquel que hace algo es quien puede equivocarse,  pero más aún que quien comete un error y no lo reconoce seguirá errando. Esperemos de corazón que la situación cambie porque si este libro representa el camino a seguir, veo a los lectores españoles abocados a acudir a The Book Depository o Amazon para adquirir los originales, y señores, ese panorama no me gusta, nada de nada, ¿y a ustedes?

Sobre el autor: David Quirós es Doctor Ingeniero de Minas y, desde tiempo inmemoriales, apasionado lector de ciencia ficción y fantasía. Fue uno de los colaboradores más destacados en la época dorada de Cyberdark y es uno de los socios fundadores de la asociación para la difusión de la literatura fantástica Los Conseguidores.

15 comentarios:

  1. ¡Sí señor! Estas cosas hay que decirlas, alto y claro. Porque los que no dominan el inglés para leerlo y solo tienen acceso a las traducciones pueden empezar a aborrecer este tipo de lecturas por incomprensibles, por chapuceras.
    Y sí, ya está bien de que las editoriales nos vean solo como "pagadores sin cerebro", nos gustan las buenas historias, sí, pero nos gustan bonitas y nos gustan bien hechas y con sentido. :D
    Gracias por poner voz a lo que muchos pensamos.

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  2. Por mi experiencia como corrector de estilo (no para La Factoría, evidentemente, sino para RBA o Planeta), cuando te dan a corregir un título de una saga ya comenzada de la que no has corregido títulos anteriores (en un mundo ideal, el mismo traductor y el mismo corrector deberían encargarse de toda la saga), te facilitan un glosario de términos y te advierten de que una de tus tareas prioritarias es unificar nomenclatura, precisamente para evitar este tipo de problemas. Luego la edición saldrá como salga, pero, por lo menos, ese aspecto se ha cuidado.

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  3. Estoy flipando… es para ponerse a llorar. ¡Gracias por este post tan iluminador!

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  4. Éste tipo de situaciones con LaFechoría son bien conocidas en la comunidad rolera española. Durante una temporada la calidad de sus juegos de rol (en traducción, corrección y maquetación) bajó mucho.

    Rebuscando por los foros se pueden encontrar anécdotas como las hormigas-guisante del juego de rol Fading Suns.

    Por ejemplo, contrató a muchos aficionados para traducir juegos de rol (algunos de ellos resultaron ser traductores decentes aunque la mayoría fueron mediocres) para ahorrar costes. Supongo que con las novelas también andarán ahorrando.

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  5. Hace años que no compro libros de La Factoría precisamente por esto. Porque son unos cutres de cuidado. Una falta de respecto total.

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  6. Por cierto, The Book Depository y Amazon vienen a ser lo mismo (Amazon lo compró en su momento). Lo digo por alguien tiene remilgos con Amazon en general.

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  7. Pues ése, el de acudir a una tienda anglosajona, fue el camino al que acudí hace ya unos pocos años, lo cual ha contribuído a mejorar mi nivel de inglés y mi cuenta corriente.
    Saludos.

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  8. "En manos enemigas". Joder, si es que hasta el título de la novela es premonitorio. Es lo que debe estar pensando algunos libros cuando se ven en manos de estos ¿editores?.

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  9. Pues ya me quedo más tranquilo, en algún momento había pensado que yo tenía un libro mal impreso.

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    1. Casi habría sido mejor que el libro estuviera mal impreso, porque esto mala solución tiene :/

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  10. Pues que quereis que os diga, si dicen que el libro ha sido corregido, una de tres: o el corrector es un vago que hace como que trabaja, o es un inútil -o un ignorante- que no tiene ni idea de su trabajo, o directamente la editorial miente. Porque algunos errores son tan, tan, TAN sangrantes que llaman a la vista que ahí hay algo que no encaja, pero sin embargo ahí están, en negro sobre blanco.
    Y por cierto, con respecto a esta saga, el quinto libro también fue una gran cagada en lo referente a la traducción: la chaqueta militar o casaca pasa a ser una "túnica", y la dotación de una nave resulta ser su "equipaje". Por eso, por volver a caer en la misma una segunda vez con esta serie, es por lo que me ha cabreado tanto esta total falta de respeto por los lectores.

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  11. En la serie de la Federación, de Peter F. Hamilton, (entre otras burradas) el maglev se traduce como "tren de nivel magnético". Y hay muchas otras "erratas" a lo largo de los dos libros o traducciones sin sentido.

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    1. Pues es una pena, porque Hamilton es un autor que merece mucho mejor trato :(

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  12. Señoras y señores, que este mes sale el octavo ¿que creeis que pasará? ¿tendremos que salir a la calle con horcas en la mano y sed de sangre o respiraremos aliviados? Yo por si acaso, voy afilando la guadaña. Y desde luego no me lo compro hasta que alguien del mundillo ponga su opinión tras haberlo leído. Lo siento, pero no pico otra vez.

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  13. Entiendo perfectamente tu decisión y, la verdad, no me extraña lo más mínimo.

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