lunes, 25 de septiembre de 2017

Pablo Bueno reseña Confrontación peligrosa, de Christopher Kastensmidt

Siempre es una gran noticia contar con una nueva reseña de Pablo Bueno y más aún si se ocupa de una serie tan interesante como La enseña del elefante y el guacamayo. ¡Espero que os guste!

Banda sonora de la reseña: Pablo sugiere leer esta reseña escuchando Never Understand, del grupo brasileño Angra (YouTube, Google Play Music)

Después de las buenas sensaciones que me dejó Encuentro fortuito, ya había ganas de retomar la serie de La enseña del elefante y el guacamayo, así que, en cuanto Sportula la publicó, me lancé a por ella para devorar esta Confrontación peligrosa de una sentada. Dicho sea de paso, el formato sigue siendo de novela corta (o novelette, no lo tengo claro, aunque tampoco soy partidario de demasiados términos para algo tan similar y, hasta cierto punto, subjetivo), con apenas algo más de cincuenta páginas.

Recordemos: la acción se sitúa en el Brasil colonial; nos encontramos con selvas, esclavos, algunas de las primeras armas de fuego y, sobre todo, con un extraordinario trasfondo, no tan trillado como otros. Es en este escenario donde nuestros dos héroes, Oludara y Gerard, africano y europeo respectivamente, protagonizan la historia que nos propone el autor. 

En esta ocasión, tras haber conseguido el permiso para fundar una compañía (en cuya enseña encontramos el guacamayo y el elefante, de ahí el nombre de la serie), se nos da a entender que Oludara y Gerard ya llevan un tiempo trabajando en su objetivo: explorar la jungla y luchar contra las fantásticas bestias que la pueblan, cual alegres “witchers” transatlánticos. Por cierto que ya en la reseña de Encuentro fortuito comentaba las similitudes que veía con la obra de Andrej Sapkowski en cuanto a ese monstruo imparable formado por la civilización que se va comiendo poco a poco a la magia y lo desconocido. No en vano, en el trasfondo encontramos elementos tan poco fantasiosos como el esclavismo o el abuso de los colonizadores sobre los pueblos indígenas. Pero, tras haber leído esta nueva entrega de la serie, tengo que decir que, si bien el escenario tiene puntos coincidentes con el del polaco, la impresión es que en este Brasil que nos presenta Kastensmidt la magia está todavía muy viva y presente para sus habitantes.

Volviendo al argumento, nuestros héroes deciden enseguida que una compañía de solo dos hombres tiene que contar por fuerza con otras armas que las de aquellas que son más numerosas. Por tal motivo deciden acudir ante la tribu de los Tupinamba para que les enseñen los secretos de la selva. Pero los nativos tienen fama de peligrosos (y de caníbales), por lo que no será una decisión exenta de riesgo.

En esta entrega, nos encontraremos de nuevo con enemigos monstruosos y figuras propias del folclore brasileño, como el Saci Pererê. Como ya dijimos en la anterior reseña, esta ambientación, alejada de las trilladas mitologías y bestiarios nórdicos, griegos y demás, es un verdadero gustazo y, sin duda, uno de los grandes activos de la misma. Del mismo modo, el tono ligero y directo con el que el autor aborda la historia le sienta fenomenal y hace que la lectura sea fresca y agradable.

Quizá el principal problema que nos encontramos es, precisamente, lo que resulta característico y tanto disfrutamos de esta serie: que se acaba demasiado pronto. Nos gustaría saber mucho más de los nuevos personajes; de la historia de Oludara y Gerard y de su relación entre sí; de ese mundo fantástico de la selva. Sin embargo, todo sucede tan deprisa que, cuando te quieres dar cuenta, ya se ha terminado la historia. Por otra parte, también es cierto que este segundo número se queda algo más flojo que el anterior, sobre todo al no contar con el elemento de novedad y sorpresa del primero.

La valoración general es, no obstante, positiva: el escenario continúa resultando interesante y nos mantiene con ganas de seguir explorándolo; la relación entre los dos protagonistas se va consolidando y funciona estupendamente. Además, la trama que se desarrolla en esta Confrontación peligrosa abre varios caminos que apuntan a direcciones muy interesantes y que, de seguro, Kastensmidt aprovechará para profundizar en su mundo y en los personajes que lo pueblan. 

Así que, dicho esto, solo falta meter toda la prisa del mundo a Sportula, porque ya estamos deseando leer el siguiente número de la serie.

1 comentario:

  1. ¡Lo tengo en el kindle! Quiero ponerme pronto a devorar esta segunda parte de Van Oost y Oludara, pero a la vez lo retraso para no tener una larga espera para la siguiente, es toda una confrontación (y nunca mejor dicho). Esperemos un anuncio próximo de la tercera :)

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