A Night Without Stars, de Peter F. Hamilton

Banda sonora de la reseña: Sugiero leer esta reseña escuchando Warrior Angel, compuesta por Steve Buick como parte de la banda sonora de A Night Without Stars (Spotify).

Como puede que sepáis, soy un gran fan de Peter F. Hamilton. Pienso que es uno de los mejores autores de ciencia ficción de las últimas décadas y su Pandora's Star es probablemente mi novela de space opera favorita. Así que le tenía muchas ganas a A Night Without Stars, especialmente porque había disfrutado mucho con The Abyss Beyond Dreams, la entrega anterior de la serie. Por desgracia, esta nueva novela me ha parecido un tanto decepcionante. 

El comienzo de Night Without Stars es bastante interesante. Los primeros capítulos tienen un ritmo alto, están llenos de sentido de la maravilla y nos ofrecen el regreso de algunos personajes de The Abyss Beyond Dreams así como el de ciertos malvados aliens de otras novelas situadas en el universo de la Commonwealth. Quizá no es tan sorprendente y excitante como el inicio de la novela anterior, pero son muy entretenidos y sólidos, exactamente lo que me espero de Hamilton.

Sin embargo, tras este prometedor arranque, las cosas cambian, en mi humilde opinión, para peor. El escenario queda reducido, la mayor parte del tiempo, al planeta de Bienvenido, un par de siglos después de los sucesos de The Abyss Beyond Dreams. Por razones que me abstendré de mencionar (entraría en el terreno de los spoilers), no hay mucha tecnología pero tampoco poderes telepáticos, haciendo que el worldbuilding sea demasiado soso para mi gusto. Además, los cambios políticos del planeta han dado lugar a un nuevo gobierno autoritario que se refleja (y se critica) de forma poco sutil.

La trama tampoco me interesó demasiado, con demasiadas páginas dedicadas a lo que me parecieron repeticiones de los mismos temas y muchos capítulos centrados en persecuciones y escapatorias sin demasiada tensión o intriga. Ni siquiera la aparición de uno de los personajes más queridos de la saga de la Commonwealth fue suficiente para mantener mi atención y confieso que al llegar al cuarto final del libro (que es extremadamente extenso) comencé a leer por encima y a saltarme páginas enteras. Es cierto que hay algunas sorpresas en los capítulos finales que son más interesantes que la parte central de la historia, pero no estoy seguro de que sirvan para redimir una novela que se arrastra y desvía durante tantas páginas como ésta. 

En resumen, A Night Without Stars es, con diferencia, el libro de Hamilton que menos me ha gustado entre todos los que he leído y, como mencionaba arriba, ha supuesto una desilusión. Vuestra opinión puede ser muy distinta, porque las reseñas que he encontrado en Internet son positivas en su mayoría (e incluso entusiastas), pero mi amiga Leticia Lara, que leyó la novela al mismo tiempo que yo, parece compartir mi opinión (podéis leer su reseña en su blog Fantástica-Ficción).

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