Antonio Díaz nos trae hoy la reseña de Brother's Ruin, una novela corta de fantasía de la escritora Emma Newman que será publicada la próxima semana por Tor.com. Espero que os guste mucho, y si estáis interesados en la obra de Newman, permaneced atentos porque es posible que pronto tengamos aquí mismo una reseña de una de sus novelas de ciencia ficción.
Banda sonora de la reseña: Antonio sugiere leer esta reseña escuchando un vals (YouTube).
Emma Newman, la escritora detrás de la novela corta Brother's Ruin, es también podcaster del curioso pero interesante Tea and Jeopardy, donde ella y su mayordomo (interpretado por su marido y también escritor Peter Newman) entrevistan a diversos autores mientras fingen estar en localizaciones exóticas (como un barco a punto de hundirse o una pirámide egipcia). Lo recomiendo especialmente por su brevedad y humor, aunque entre las voces impostadas y el lenguaje un tanto estirado no es especialmente fácil de seguir. Los episodios más destacables son los dedicados a Adrian Tchaikovsky, el incombustible Joe Abercrombie y la misteriosa Seanan McGuire.
Lo primero que me llamó la atención de Newman es su hermosa voz y el toque distinguido tan propio de los británicos del siglo XIX. Por eso no me sorprende que haya decidido ambientar Brother's Ruin en la época victoriana. Da la impresión de que Newman pertenece a esos tiempos de corsés, excesivas normas culturales y absoluto control sobre uno mismo.
Esta novela corta, publicada bajo el sello digital Tor.com, es la primera de una serie que narra las aventuras de los hermanos Charlotte y Benjamin Gunn. Pertenecen a una familia de clase media en un mundo donde la sociedad tiene una casta extra, los magos. Charlotte posee una reseñable capacidad mágica pero prefiere ser ilustradora de libros, aunque mantiene su profesión en secreto porque teme que su prometido y/o su padre se vean humillados por su éxito profesional (y económico). Además, no desea que nadie descubra tampoco esos poderes mágicos porque el gremio de magos recluta forzosamente a cualquier candidato potencial y le prohibiría casarse con George, su prometido, o dedicarse al dibujo. Por otro lado, Ben posee una capacidad mágica muy limitada y una salud muy frágil, pero un buen corazón y una relación muy cercana con su hermana.
Aunque éste es el estado inicial de los personajes al comenzar la novella, las cosas cambiarán sustancialmente. Ésta es una obra pausada y que contiene una aventura autoconclusiva. En el fondo, sin embargo, no es más que una presentación de los personajes y una pequeña introducción al mundo de Industrial Magic (que es el nombre de la saga). Emma Newman traza un mundo clásico victoriano pero con especial atención al detalle. El lenguaje está muy bien escogido, con terminología propia de la época y con diferentes registros culturales e idiomáticos para los distintos personajes. Es algo que se agradece en una ambientación que, si bien está bastante manida, sigue siendo atractiva si está bien escrita (como es el caso). Lo más interesante, como cabe suponer, es el gremio de magos. Desgraciadamente, no se proporciona demasiada información. Baste decir que la tecnología mecánica (como relojes y otros mecanismos a base de engranajes) son construidos, manejados y activados por los magos del gremio. Es decir, que hablamos de una fusión entre la magia y la tecnología.
La protagonista de esta primera novella, Charlotte Gunn, es una joven creíble, con una voz muy característica y, aunque adolece de los rasgos clásicos de las jóvenes de Jane Austen y obras similares, es de carácter fuerte y convicciones firmes. Sinceramente se agradece encontrarse a un personaje de su tiempo en una novela histórica. El resto de personajes no destacan realmente, quitando quizás a su hermano Ben, pero no hay demasiado espacio en las poco más de 100 páginas para detallar demasiado.
Argumentalmente, Brother's Ruin no sorprende casi nada. Hay un par de nudos de la trama que se resuelven de forma ingeniosa, pero Newman no se calienta demasiado y sigue el monomito campbelliano al pie de la letra. Lo que no es necesariamente malo. El monomito ha sido usado hasta la extenuación porque es una fórmula que engancha y funciona, y utilizado con inteligencia da lugar a una novella tan entretenida y dinámica como Brother's Ruin.
Personalmente, tengo ganas de seguir leyendo sobre las aventuras de los hermanos Gunn, porque pienso que Newman se separará un tanto de estos caminos tan transitados para descubrirnos algo nuevo. Y si éste no es el caso, por lo menos estaremos agradablemente entretenidos durante el viaje.
Imagino que la terminología específica y el lenguaje adaptado a la época no contribuyen a que sea muy fácil de leer no? ¿Me recomendarías darle un tiento?
ResponderEliminarA la espera de que opine Antonio también, te diré que yo lo terminé de leer anoche y es muy ágil y diría que sencillo de leer. Te animo, sin duda, a que lo intentes.
ResponderEliminarEstupendo, me fío de ti. ¡Otra novella de tor a la pila! XD
EliminarEs cierto que tiene algo de vocabulario específico pero son términos concretos, normalmente sustantivos, que no entorpecen la lectura. En definitiva es una historia de aventuras, y como tal, tiene un lenguaje relativamente ágil.
ResponderEliminarGenial, a ver si le hago sitio en unas semanitas.
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