Banda sonora de la reseña: Sugiero leer esta reseña escuchando Slow Bullet, de The Slides (Spotify, YouTube).
Slow Bullets es una nueva novela corta de ciencia ficción (casi una novela, puesto que se queda al límite de las 40.000 palabras) de Alastair Reynolds. Publicada por la maravillosa editorial Tachyon y escrita por uno de mis autores favoritos, he estado esperando con ganas la oportunidad de leerla desde que me enteré de su existencia, hace unos cuantos meses. Aunque mentiría si dijera que es la mejor obra de Reynolds, no me ha decepcionado y la he disfrutado un montón.
Slow Bullets es, sobre todo, la historia de una venganza, pero también toma elementos muy interesantes de subgéneros como la ficción post-apocalíptica o las historias de naves generacionales. También tiene una tenue conexión con la universo de Espacio revelación, lo que sin duda resultará interesante para los fans de las obras anteriores de Alastair Reynolds.
Para mí, el aspecto más atractivo de Slow Bullets ha sido, sin embargo, todo aquello que tiene que ver con las ideas de memoria e identidad. No quiero revelar demasiado, pero en esta novela corta los protagonistas tienen que enfrentarse a ciertos sucesos ante los que la capacidad de almacenar y preservar información es, probablemente, la única opción para superar la terrible situación en la que, inesperadamente, se hallan. En un principio, las consideraciones son principalmente prácticas (qué conservar y cómo almacenarlo, por ejemplo) pero pronto toman una naturaleza más filosófica, tocando temas delicados y profundos como qué nos define como sociedad y como individuos.
Otro elemento que me ha gustado mucho en Slow Bullets es la voz de la protagonista principal. La historia está contada en primera persona por una joven con un pasado ciertamente traumático y los primeros capítulos, en los que somos testigos de algunos de los acontecimientos que han conducido hasta la situación actual, son simplemente excelentes, como lo es la parte final del libro en la que se desvelan los motivos de parte sus actos.
El ritmo de Slow Bullets es un tanto irregular, con algunas partes muy intensas seguidas de algunos capítulos más aburridos. Además, con las excepción de la protagonista principal (y, posiblemente, uno más) los personajes son simples esbozos sin demasiada profundidad o desarrollo. No debemos olvidar que se trata solamente de una novela corta y no hay mucho espacio para hacer cosas especialmente elaboradas, pero mi impresión es que el libro deja algo que desear en ese aspecto.
A pesar de estos problemas, Slow Bullets es una buena y sólida historia de ciencia ficción con varios capítulos brillantes y algunas reflexiones interesantes sobre la memoria y la identidad. Como mencionaba arriba, no es la mejor novela corta que ha escrito Reynolds (es difícil superar Diamond Dogs, por ejemplo) pero la recomiendo casi sin reservas. Y quiero agradecer de nuevo la labor que está haciendo Tachyon publicando nuevas y excitantes historias de ciencia ficción y fantasía. ¡Seguid publicando estas estupendas novelas cortas!
Para mí, el aspecto más atractivo de Slow Bullets ha sido, sin embargo, todo aquello que tiene que ver con las ideas de memoria e identidad. No quiero revelar demasiado, pero en esta novela corta los protagonistas tienen que enfrentarse a ciertos sucesos ante los que la capacidad de almacenar y preservar información es, probablemente, la única opción para superar la terrible situación en la que, inesperadamente, se hallan. En un principio, las consideraciones son principalmente prácticas (qué conservar y cómo almacenarlo, por ejemplo) pero pronto toman una naturaleza más filosófica, tocando temas delicados y profundos como qué nos define como sociedad y como individuos.
Otro elemento que me ha gustado mucho en Slow Bullets es la voz de la protagonista principal. La historia está contada en primera persona por una joven con un pasado ciertamente traumático y los primeros capítulos, en los que somos testigos de algunos de los acontecimientos que han conducido hasta la situación actual, son simplemente excelentes, como lo es la parte final del libro en la que se desvelan los motivos de parte sus actos.
El ritmo de Slow Bullets es un tanto irregular, con algunas partes muy intensas seguidas de algunos capítulos más aburridos. Además, con las excepción de la protagonista principal (y, posiblemente, uno más) los personajes son simples esbozos sin demasiada profundidad o desarrollo. No debemos olvidar que se trata solamente de una novela corta y no hay mucho espacio para hacer cosas especialmente elaboradas, pero mi impresión es que el libro deja algo que desear en ese aspecto.
A pesar de estos problemas, Slow Bullets es una buena y sólida historia de ciencia ficción con varios capítulos brillantes y algunas reflexiones interesantes sobre la memoria y la identidad. Como mencionaba arriba, no es la mejor novela corta que ha escrito Reynolds (es difícil superar Diamond Dogs, por ejemplo) pero la recomiendo casi sin reservas. Y quiero agradecer de nuevo la labor que está haciendo Tachyon publicando nuevas y excitantes historias de ciencia ficción y fantasía. ¡Seguid publicando estas estupendas novelas cortas!
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No olvidaré nunca cuando abrí Espacio revelación por primera vez y me encontré con las tormentas cuchillo, y los amortajados... y tantas otras historias. Y con un final a la altura de las expectativas que se habían ido generando a lo largo de la novela, que muchas veces es lo más difícil de conseguir.
ResponderEliminarReynolds es de mis autores favoritos. Y Pushing Ice y House of Suns me gustan aún más que Espacio Revelación.
ResponderEliminarHe visto que House of Suns está traducida... ¿sabes si está bien la traducción?
ResponderEliminarPues no tengo ni idea, lo siento. Igual puedes probar con un fragmento de Amazon y ver qué te parece
ResponderEliminarHecho. Me ha gustado. La leeré... y también he visto, gracias a tu blog, que otro de mis autores favoritos, Peter Watts, ha publicado una nueva novela (Echopraxia, basada, además, en el universo de Blindsight) y... ¡no me había enterado!. Además de Visión ciega me gusto mucho el cuento La isla, publicado por Fata libelli en Ad Astra. Cuántos viajes por hacer este verano. ¡Gracias!
ResponderEliminarHouse of Suns está muy, muy bien. Si te convence lo que has leído de la traducción, ve a por ella, que te va a gustar.
ResponderEliminarRespecto a Echopraxia, la verdad es que me decepcionó un poco. Pero he visto opiniones para todos los gustos, así que igual tu experiencia es mejor que la mía.